¿Estoy embarazada? La mejor forma de responder esta pregunta es haciendo una prueba. Sin embargo, en tu organismo puede haber ya bastantes pistas. Seguidamente, te mostramos los síntomas de las primeras semanas de embarazo.
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Leer más adelante: ¿Cómo saber si estoy embarazada?
Síntomas de las primeras semanas de embarazo: ¿Qué esperar cuando se espera?
Desde las primeras semanas de gestación, el cuerpo de la mujer comienza a prepararse para recibir un inquilino muy especial durante nueve meses.
Lo anterior, hará posible la manifestación de algunos síntomas que podrían indicar que es momento de hacer una prueba de embarazo y visitar un especialista médico que nos oriente en todo el proceso.
Y es que, aunque las mujeres desarrollen cierta intuición para saber cuándo se hallan albergando vida en su interior. No está demás, conocer cuáles podrían ser esos indicadores de preñez antes de comunicar las buenas nuevas.
A continuación ¿Cuáles son los síntomas de las primeras semanas de embarazo y por qué se producen?
1. Cambios en el flujo vaginal
Durante las primeras semanas de embarazo, la mujer experimenta un aumento de estrógenos y progesterona. Esto origina un incremento en la cantidad de flujo segregado por la vagina, además de un cambio blanquecino e incoloro en el mismo.
Ahora bien, con este síntoma hay que estar especialmente atentas, ya que, si produce picor o tiene mal olor puede tratarse de una infección y requerirá la intervención de un especialista de la salud física.
2. Menstruación ausente
Uno de los síntomas más naturales para indicar la presencia de un embarazo, es el retardo o ausencia de la menstruación.
A pesar de lo anterior, es importante considerar que el mismo no es un signo definitivo de preñez.
Esto se debe a que, el ciclo hormonal de la mujer generalmente es muy cambiante, por ende, solo las féminas que sean extremadamente regulares en su período podrán encender sus alertas de futuras mamás cuando esto ocurra.
3. Inflamación mamaria
El aumento y dolor mamario es por lo general el primer síntoma en aparecer para indicar la presencia de un bebé.
Esto ya que, desde el primer mes de embarazo los pechos se preparan para producir el calostro necesario para el proceso de lactancia.
4. Micciones frecuentes
Al inicio del embarazo el útero comienza a crecer para brindarle un cómodo espacio al bebé en desarrollo.
Lo anterior, genera como consecuencia que algunos órganos incluida la vejiga se comprima.
La compresión de la vejiga, produce que se reduzca el espacio destinado para la orina y por ende es normal que las ganas de miccionar se vuelvan más frecuentes.
Considerando lo ya mencionado, será pertinente que la futura madre fortalezca sus hábitos de higiene íntima, para prevenir infecciones capaces de generar complicaciones en el embarazo.
5. Náuseas y vómitos
Cuando se tiene un embarazo en desarrollo, los síntomas digestivos no se hacen esperar.
En este orden de ideas, las náuseas y los vómitos especialmente durante la mañana suelen ser un signo común de preñez.
El motivo de este malestar estomacal, es el resultado de las alteraciones hormonales que están ocurriendo en la mujer.
Para reducirlo, es recomendable comer pocos alimentos, pero de forma frecuente. Esto ocupará el estómago sin saturarlo.
6. Fatiga
Los niveles de progesterona en la mujer embarazada aumentan de manera importante, esto puede ser la causa principal de la sensación de fatiga o sueño constante que presentan las futuras madres.
En este caso, lo recomendable es descansar todo lo que sea posible y si en los próximos meses este síntoma no disminuye, lo mejor será visitar al médico para descartar patologías como anemia o hipersomnia.
Síntomas menos comunes durante las primeras semanas de embarazo
Durante las primeras semanas de embarazo también pueden presentarse algunos síntomas poco comunes, entre ellos los siguientes:
a. Sangrado de implantación o menstruación falsa
Algunas mujeres pasan por desapercibidos sus embarazos, esto motivado al hecho de que presentaron un proceso de menstruación corto.
A esta situación se le denomina sangrado de implantación o menstruación falsa y se produce cuando el embrión se implanta en el útero de la futura madre.
b. Calambres
El crecimiento del útero muchas veces suele producir sensación de molestias y calambres abdominales.
Por ende, la sensación de abdomen aumentado y los pinchazos abdominales, podrían estar informando sobre la presencia de un bebé en camino.
c. Gases y estreñimiento
Otra consecuencia de la progesterona elevada es la ralentización del tránsito intestinal.
Por esta razón, la aparición de flatulencias, gases, sensación de pesadez y estreñimiento en las primeras semanas de embarazo son normales.
Ahora bien, para minimizar estas incomodidades es recomendable consumir alimentos ricos en fibra, beber abundante agua e ingerir antiácidos.
d. Mareos
El embarazo es un proceso asombroso, pero también un poco difícil.
Los severos cambios hormonales que se producen en esta etapa, alteran el funcionamiento de todos los órganos del cuerpo incluidos el corazón y el cerebro, quienes podrían ser responsables de mareos y desmayos.
e. Antojos
La presencia de antojos raros y frecuentes es responsabilidad de las hormonas que hacen de las suyas.
Sucumbir a los primitivos deseos alimentarios en el embarazo, no está mal siempre y cuando se haga con cautela. Recordemos que una nutrición adecuada es la clave para evitar otras complicaciones en este periodo.
d. Otros indicadores de embarazo
- Sangrado nasal y en las encías.
- Mayor salivación.
- Cambios de humor o emocionales.
- Alteración en el gusto y el olfato.
- Congestión nasal.
- Sabor metálico en la boca.
- Movimientos fetales.
Consideraciones finales
Los síntomas en las primeras semanas del embarazo pueden fluctuar, incluso en algunos casos podrían pasar desapercibidos o ser confundidos con otras patologías.
Ante la sospecha de estar albergando vida, lo mejor siempre será acudir a un especialista que pueda sacarte totalmente de dudas al emplear evaluaciones precisas para ello. Por otra parte, si ya se tiene la certeza de estar esperando un niño, la presencia de un doctor también será necesaria, para dar inicio al control prenatal que evitará complicaciones y garantizará un embarazo saludable además de feliz.