Identificar el trabajo de parto cuando se es madre primeriza no siempre es tan sencillo como lo comentan. En ocasiones puede ser complicado y llegar a confundirse con un alumbramiento falso o contracciones de Braxton Hicks.
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Trabajo de parto falso: ¿Qué son las contracciones de Braxton Hicks?
La mayoría de las embarazadas previamente a su proceso de alumbramiento pueden sentir dolores leves en el útero.
Esto es totalmente normal y aunque se confunden con un falso trabajo de parto, distan mucho de serlo tratándose de las Contracciones de Braxton Hicks.
Las mismas fueron identificadas por primera vez en 1872 por el médico inglés John Braxton Hicks.
Siendo contracciones uterinas presentadas generalmente durante el último trimestre de embarazo. Estas resultan naturales, ya que, el útero inicia su preparación para el momento del parto.
Síntomas y características de las contracciones de Braxton Hicks
Aunque suele afirmarse que dichas contracciones son muy similares a las experimentadas previamente al trabajo de parto, esto no es la realidad absoluta pues existen diferencias bien marcadas y seguidamente las mencionamos.
Estas pulsiones uterinas son menos dolorosas con relación a las contracciones de parto. Igualmente, poseen una menor duración y no se manifiestan en intervalos de tiempo regulares.
Un elemento importante con respecto a este proceso también denominado prodrómico o latente, es que no se acompaña de sangrado, segregación de líquido amniótico o disminución del movimiento fetal.
Preguntas más frecuentes sobre las contracciones de Braxton Hicks
Entre las dudas más comunes sobre esta manifestación propia del embarazo resaltan las mencionadas próximamente
1. ¿Cuáles son las causas de las contracciones de Braxton Hicks?
Aunque ya hemos mencionado que dichas contracciones son naturales y se presentan gracias a la preparación del útero para el alumbramiento.
Muchas veces estas pueden desencadenarse por los siguientes motivos:
- Aumento de la actividad de la madre o el feto producto de la estimulación del abdomen materno.
- Poco consumo de agua o deshidratación.
- Relaciones sexuales.
- Vejiga distendida.
- Palpación del vientre materno.
2. ¿Cuál es el tratamiento para las contracciones de Braxton Hicks?
Existen algunas actividades que pueden ayudar a disminuir las dolencias e incomodidades producidas por estas contracciones, las mismas son:
- Cambiar de posición o salir a caminar si se ha estado mucho tiempo en el mismo sitio.
- Ingerir un vaso de agua o té herbal sin contraindicaciones para el embarazo.
- Realizar ejercicios de respiración o mindfulness.
- Ingerir algún alimento liviano.
3. ¿Cuáles son los síntomas de que el trabajo de parto se acerca?
Aunque el obstetra tratante indicará una fecha probable para el parto, también existen una serie de eventos que pudiesen anunciar el momento del mismo. Estos son:
- Posicionamiento: ocurre cuando la cabeza del bebé se ubica en la pelvis. El abdomen lucirá más bajo y la necesidad de orinar será mayor.
- Expulsión del tapón mucoso: una secreción espesa de color marrón excretada por la vagina. Indica dilatación uterina.
- Ruptura de la fuente: antes del nacimiento el saco amniótico se romperá produciendo la expulsión de un líquido acuoso en forma de chorro o goteo.
- Soltura estomacal: previamente al parto muchas mujeres sienten la necesidad de ir al baño, estas evacuaciones pueden ser diarreicas o más sueltas.
4. ¿Cuándo acudir al médico?
Cuando una embarazada posee menos de 37 semanas de gestación y experimenta contracciones frecuentes además de dolorosas. Lo mejor será acudir al médico de confianza.
Esto para descartar la posibilidad de un parto prematuro, especialmente cuando se manifiesta alguno de los siguientes indicadores:
- Incremento del flujo vaginal.
- Sangrado o manchado vaginal.
- Dolor lumbar.
- Presión pélvica.
- Un número mayor de cuatro contracciones por hora.
- Calambres abdominales.
Consideraciones finales
El autodiagnóstico nunca es una alternativa positiva y segura durante el embarazo. Por ende, ante cualquier duda, cambio o síntoma poco convencional, la mejor alternativa será recurrir a tu obstetra de confianza para recibir un diagnóstico prudente además de las asesorías pertinentes.