El proyecto de vida, empieza con el matrimonio y sigue con los hijos, siendo el baluarte en cada camino que emprendemos. Por lo tanto, te preguntarás ¿qué esperar de la maternidad?
Esta duda, te resultará si estás en espera de tu primer bebé o, por el contrario, tienes planes de futuro y la maternidad es uno de los pasos primordiales.
Para ello, te explicaremos, con base en nuestra experiencia, sobre qué esperar de la maternidad, y algunos consejos útiles en este nuevo proyecto de vida. ¡Acompáñanos!
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¿Qué es la maternidad?
Es el estado asociado a la madre, sumado a la experiencia, crianza, comprensión, comunicación y amor de la progenitora a sus hijos.
Otro significado de maternidad, es un compromiso de amor y responsabilidad de una mujer que es madre hacia sus hijos.
Partiendo del concepto, explicaremos bajo nuestra perspectiva qué esperar de la maternidad.
¿Qué esperar de la maternidad?
Cada experiencia en la vida cuenta para nuestro desenvolvimiento, y la maternidad, no es la excepción.
Si bien es cierto que es amor, comprensión y comunicación, también, lo es, la responsabilidad que adquirimos como mujer en protección y crianza en nuestros hijos.
Asimismo, existen diversas situaciones que, como madre, debemos identificar y trabajar en función de las mismas, para mantener el bienestar de la familia.
En los siglos anteriores a la actualidad, la figura materna siempre fue concebida como protectora, encargada de la educación de los hijos y las labores domésticas.
Sin embargo, con el paso de los años y las civilizaciones, la madre no solo cumple roles en el hogar, sino, también, en lo económico, aportando en las finanzas familiares.
Para tener una mejor comprensión de esta interrogante, abordaremos algunos tópicos referentes a la maternidad.
1. Es una absoluta responsabilidad
La maternidad es sinónimo de muchas definiciones o términos, incluyendo la responsabilidad, si te encuentras en espera de tu primer hijo, debes tener en cuenta muchos aspectos.
En primer lugar, la prioridad pasa por ese pequeño ser que nace en tu vientre, donde, las salidas nocturnas, encuentros con amigas y demás menesteres, cambian de la noche a la mañana.
Por ello, nuestro mundo girará en torno a esa criatura tan hermosa que nace en el útero, y que, desde el primer día, ocupará todo nuestro corazón.
La maternidad no solo es concebir un bebé y darle una mejor calidad de vida, también, es fundamental, el amor, la comunicación y el cariño que le impregnamos desde el día 1.
Por lo tanto, las noches en vela serán muy frecuentes, claro es muy importante, involucrar a tu pareja, en el devenir de este largo y gratificante camino.
Asimismo, la maternidad enseña y la experiencia dicta mejor las clases, siendo un libro abierto, donde cada página contará lo gratificante de ser mamá.
2. El amor todo lo puede
El amor todo lo puede y este dicho cobra más vida, si lo que empleamos lo hacemos con este hermoso sentimiento.
La dedicación, esmero y amor, siempre van de la mano, aunado a múltiples aspectos que harán este camino un trayecto exitoso.
No existen los manuales perfectos para ser madres, eso se llega con la experiencia propia y también, la de otras mamás.
Por su parte, enseñar con amor, dar el calor de madre a ese bebé que viene en camino o que está por nacer, es sublime en diversos aspectos.
Cabe resaltar, que el amor es un sentimiento donde las palabras y las acciones cuentan, dejando huellas positivas en nuestra familia.
3. No todas nacen con ese don
Tal vez, escuchas u observar en las noticias, sobre las mujeres que deciden no ser madres, y eso es una decisión totalmente respetable.
No por el hecho de ser mujeres, ya se nace con un patrón de que la maternidad se lleva en las venas.
Muchas mujeres pasan por un ciclo de madurez, donde en cierto momento de la vida, la maternidad cambia para siempre y esa etapa, suceden con la mayoría de las mamás.
Ahora bien, la maternidad va más allá que ser mamá, es dedicación, responsabilidad, protección, comprensión, comunicación, paciencia y, sobre todo, amor.
Por ende, no todas las mujeres nacen o tienen el don de la maternidad, sino, que en situaciones se llega a la madurez mental y, en otras, simplemente no es su deseo.
4. Cambiar paradigmas generacionales
Existen madres que tratan a sus hijos de mala manera, ‘porque así fueron sus padres (abuelos) con ellos’, eso es un grave error que lamentablemente en el siglo XXI se comete.
Sin importar, el trato que llevaste de tus padres, cada experiencia es distinta y las buenas costumbres deben prevalecer ante los tratos insanos.
Es menester, recordar que los niños a medida que crecen con su figuras materna y paterna, toman tu ejemplo, sea bueno o malo.
Por consiguiente, no podemos tratar de una manera incorrecta a un niño, solo por el hecho, que recibiste otro tipo de trato, eso es seguir con rencor o no superar una etapa.
Como padres, debemos ser más comprensivos, impartir roles, enseñar con amor y corregir en una manera correcta, las palabras son suficientes y el aprendizaje empieza en casa.
5. Disfruta del tiempo libre con tus hijos
Hay muchas mamás que tenemos ocupaciones fuera del hogar, algunas estudian y otras trabajan, o ambas labores.
No obstante, dedicar el tiempo libre a tus hijos, en la realización de sus tareas escolares, disfrutar de una película en familia y hablar con ello, son pautas que no se deben quebrantar.
Dicho de otra manera, la maternidad es dedicar tiempo a tus hijos, tengan o no una figura paterna, donde la abnegación y el amor siempre triunfa.
Autora: Marines Boy de García.
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